Cuernos de gacela

Hoy una receta de Oriente Medio, los cuernos de gacela, una pasta horneada rellena de una masa de almendra y todo ello aromatizado con agua de azahar, lo que le da un sabor tan peculiar como delicioso.

Por último antes de entrar en faena, deciros únicamente que están más ricas al día siguiente que recién hechas. Se trata de una receta sencilla, pero algo más laboriosa que lo que acostumbro a hacer. Y son otra maravilla del libro pastelería en tres pasos del que ya os hablé alguna otra vez.

Ingredientes para unos 50 cuernitos

375 g de harina

2 cucharadas de azúcar

Pizca de sal

150 g de mantequilla a temperatura ambiente

1/2 clara

1 huevo

60 ml de agua de azahar

30 ml de agua

500 g de almendra molida

270 g de azúcar glas

1 cucharada de miel

1 cucharada de mantequilla derretida

1 pizca de nuez moscada

1/2 cucharadita de canela en polvo

Empezaremos preparando la masa. Para ello sólo hay que verter la harina tamizada, el azúcar y la sal en un bol. Hacemos un agujero en forma de volcán y ponemos dentro la mantequilla derretida, y amasamos. Incorporamos la media clara de huevo y vamos añadiendo 30 ml de agua de azahar y 30 ml de agua lentamente y seguimos amasando hasta obtener una masa flexible. La tapamos y dejamos reposar, mientras tanto hacemos el  relleno.

Mezclamos la almendra molida con 200 g de azúcar glas tamizado, un huevo, el resto del agua de azahar ( otros 30 ml) la miel, la cucharada de mantequilla derretida, nuez moscada y canela.

Una vez listo, empezamos a darles forma. Estiramos la masa de forma que quede muy fina, que se vea a través de ella. Luego ponemos el relleno en el interior y envolvemos con la masa como si fuera una empanadilla.

Damos forma de media luna, sellamos bien y cortamos el exceso de masa

Mientras les damos forma, precalentamos el horno a 180 grados. 

Los horneamos a esa temperatura durante 15 minutos hasta que comiencen a dorarse. Los retiramos y espolvoreamos con azúcar glas cuando hayan templado